Lorena, quien da nombre al negocio, es una amante de la belleza y el maquillaje, y ha seguido esta vocación desde la infancia hasta llegar a formar este centro de belleza.

Con estudios de estética realizados en Zaragoza, en seguida comenzó con la profesión de esteticista, recorriendo todo el territorio aragonés, y dando a conocer su trabajo. Esto le sirvió para aprender a trabajar con personas de todo tipo de edades, y conocer las necesidades de su piel. Este fue el inicio del camino a montar un negocio propio: el centro Lorena Logroño Estética.

A día de hoy, Lorena Logroño se caracteriza por buscar la excelencia en cada servicio, y se ha convertido en un centro de referencia, gracias a sus constantes innovaciones, formaciones y tecnología vanguardista. La investigación para seguir mejorando es constante, y gracias a ello se ha convertido en el puente que une al mundo rural con todo lo que puede encontrarse en el sector de la belleza en grandes metrópolis como Zaragoza.